El estrés es una tensión especial que siente una
persona en su organismo y que se produce como consecuencia de determinadas
situaciones que agobian a la persona, es la respuesta digámoslo así del cuerpo
a saber que algo malo le esta pasando.
Se trata de un síndrome muy común hoy en día debido
al estilo y al ritmo de vida actual. El estrés aparece cuando una persona exige
demasiado a su organismo, ya sea en el plano físico o psicológico. Esto provoca
un estado de ansiedad, cansancio y gran cantidad de síntomas físicos que
podrían variar de acuerdo a cada persona. Esta fatiga y ansiedad física y
psicológica podrían deberse a diferentes factores, siendo uno de los más
habituales el estrés laboral (ya no lo nieguen…todos hemos pasado por ahí), es
decir aquel que aparece debido a una sobre-exigencia de trabajo en el ámbito
laboral. También puede aparecer por muchos otros motivos ya que lo que a una
persona puede estresarle, es posible a que a otra no le estrese. A menudo, el
estrés es mas psicológico que físico, es decir, que no hace falta que una
persona esté demasiado cargada de trabajo o pase demasiadas horas trabajando o
haciendo alguna actividad sino que puede deberse también a otro tipo de
factores, como por ejemplo a una situación traumática o a una situación que
esté afectando al individuo psicológicamente. Por ejemplo, la toma de una
decisión muy importante para una persona que le sobrepasa y que no se siente
capaz de tomar, puede ser una causa o una fuente importante de estrés.
El estrés funciona como respuesta del organismo
ante determinados estímulos que nos resultan amenazadores o que nos ponen a
prueba y nos exigen más de lo que podemos dar.
En cierto modo, todos padecemos o podemos padecer
de estrés en algún momento de nuestras vidas y esto es necesario ya que nos
sirve para adaptarnos a la situación y a las circunstancias que nos rodean. El
problema aparece cuando el estrés se vuelve excesivo porque la exigencia es
demasiada y aparece una gran cantidad de síntomas que afectan al desarrollo
normal del día a día.
Los
síntomas más habituales del estrés son:
- Aumento de la presión arterial.
- Taquicardia y palpitaciones.
- Sensación de ansiedad.
- Deseos de huir de la situación estresante.
- Dificultad para concentrarse.
- Insomnio.
- Pupilas dilatadas.
- Dolor o acidez estomacal.
- Irritabilidad excesiva.
- Miedos.
- Inseguridad.
- Rigidez muscular.
- Sudoración excesiva.
- Temblores
- Dolores de cabeza
- Cambios de ánimo
- Dificultad para decidir
- Tartamudeo
- Accesos de llanto
- Problemas para respirar
No todas las personas presentan los mismos síntomas ante una situación
de estrés,. Los síntomas más notorios y que casi todo el mundo padece es la
permanente sensación de miedo y duda, así como el cansancio excesivo,
acompañado de algún síntoma fisiológico como por ejemplo el malestar estomacal
constante, o los dolores de cabeza.
No dudes en acudir al medico si crees que estos síntomas ya rebasan los
limites de la normalidad, ya que esto puede acarrear una serie de consecuencias
revés para el organismos.