Hace tiempo algún tiempo que había
escuchado de él, mi pal lo conocía ya desde antes, pero la verdad es que no me había
dado la oportunidad de conocerlo, lo cual me trajo un recuerdo de algunas
primaveras.
Hace varios años, por ahí de
1998, además de ser año del mundial de Francia, recuerdo que fue cuando dieron
la noticia de que había muerto Octavio Paz, si bien y antes había leído algunas
cosas de él, recuerdo mucho que compre “La llama doble” a lo cual a quien
llamaremos PP me dijo: “Me parece muy buen homenaje que leas algo por tu propia
cuenta” y la verdad es que me gusto mucho ese libro.
Pues bien por azares del destino cayó
en mis manos un libro del cual me había hablado mucho “Vivir para contarla”, la
cual trata de la vida de Gabriel García Márquez, obviamente me había hablado mi
pal y también fue quien me presto el libro, eso si…dándome una advertencia: me decía
que quizás no me gustaría el libro pues no tenía nada que ver con lo que me
gusta leer, es decir, no había suspenso o una trama que me cautivara… La verdad es que al mesta leyéndolo es una
historia como tal y del mismo modo tiene su encanto, por lo que puedo decir que
si me gusto.
Les daré el resumen de lo que conocí
durante mis viajes en el metro, pues como saben, es el tiempo en que leo q aun
cuando pueda parecer poco es bastante relajante, solo sino contamos cuando se
llena y no te puedes mover, mucho menos leer o ni siquiera digamos respirar y
vas sudando como pollo en horno….en fin me proyecte un poco regresemos.
Este libro trata de sus memorias
desde niño hasta que se va a Suiza por un periodo de 2 años prácticamente sin
papeles, exiliado y hasta cierto punto perseguido por el gobierno de Colombia
por su forma de escribir ciertas notas periodísticas o por tener cierto tipo de
relaciones con personas que en ese momento se consideraban comunistas
peligrosos desde el Che Guevara, Fidel Castro.
Me parece que el hecho es que
estaba en el lugar correcto en el momento correcto, la suerte es algo en lo que
no puedo decir que creo plenamente, pero que muchas veces hay cosas que no se
pueden explicar, como la suerte que tubo de entrar al colegio, de estar
hablando en el tren con el ministro de educación y que este le diera la
oportunidad de competir por una beca, que por pura diversión diera discursos en
la escuela y que al escribirlos le fuera saliendo el gusto por ello, de cómo sus
libros fueron basado en historiales reales, como 100 años de soledad, memoria
de mis ****** , en fin esto me da ganas de leer otro libro que espero mi pal
encuentre pronto para poder leerlo.
Ahora algo que me llamo la atención
es que hasta los últimos días de su vida no pudo superar su mala ortografía, lo
cual me hace sentir mucho mejor de la mía, si alguien que recibió el premio
nobel de literatura puede tenerlo son esos errores, entonces aun tengo salvación!!!
Además, los errores de ortografía se deben a los maestros que no nos corrigieron
en el momento.
Fue un gusto haberlo conocido
incluso después de su muerte.
Ya lo tengo...Nell
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