MADRE SOLTERA...

El termino madre soltera se ha usado para definir a la mujer que queda embarazada y decide ser padre y madre a la vez debido a la ausencia y/o negación paternal del hombre.

Las circunstancias por las que una mujer se convierte en madre soltera son variables, desde un “deslumbramiento” fugaz, el hecho de confiar plenamente en tu pareja para evitar el embarazo hasta métodos anticonceptivos ineficientes, sin embargo, también ocurre lo contrario por más que te cuidas, sucede (decía mi abuela, la naturaleza es sabia).

Hace mucho que no nombro a “Friends”, pero si son fans como yo, sabrán que en una de esas noches de pasión Rachel y Ross quedan embarazados, y Rachel se desconcierta porque tanto ella como el se cuidaron y protegieron para evitar esa situación. Ross tiene pareja y Rachel decide ser madre soltera sin exigirle más que darle atención al bebe.

A lo largo de la temporada vemos como Rachel vive su embarazo, que no siempre es todo lo lindo que pudiera ser, empezando por los malestares matutinos, el hecho de no poder dormir bien los últimos meses, los antojos, los kilos que se van acumulando, y por supuesto, el hecho de pensar en que hará cuando nazca el bebe. En la serie se ve como sus amigos la apoyan en todo momento y como Ross la cuida y procura cuando está embarazada, sin embargo no retoman la relación.

Quizá esta sería la situación ideal si decides ser madre soltera (si lo decides), tener un buen trabajo, un lugar donde vivir, amigos que te apoyan en todo momento, el padre de tu hijo dispuesto a ayudarte en lo que necesites. Pero, en la vida real no es así, claro que hay excepciones pero no las suficientes.

La situación se torna preocupante si recurrimos a las estadísticas de INEGI, que para el caso solo daremos un dato duro: de total de mujeres de 15 años o más el 72% ha tenido al menos un hijo vivo. De ese total alrededor del 35% es madre soltera.

Madre soltera (oh! Estoy embarazada). Dice que fue en una noche que su novio se quedo. Ella vivía sola en la ciudad, tenía su trabajo y su vida social, era responsable de sus gastos aunque a veces por andar en la fiesta no le alcanzaba. Me conto que no usaron protección, porque ella usaba el DIU, y para no errarle se tomo la famosa píldora del día después. Pasó una semana y empezó con las molestias, como no se le quitaban fue al doctor y ahí le confirmo la noticia: estas embarazada.  Hizo mil preguntas de cómo y porque, pero la respuesta no le daría marcha atrás a su estado.

Hablo con el novio pero solo se limitaría a apoyarla económicamente cuando pudiera. Así que ahí estaba, seria madre soltera sin planearlo ni esperarlo.

Las dificultades no se hicieron esperar, viviendo sola tenía que organizar su tiempo, su dinero y su espacio. Olvidarse de las fiestas, desveladas, gastos para darse un gusto, de los domingos para dormir y economizar donde pudiera.

Aparentemente se estaba organizado bien, consiguió guardería y más o menos le iba con los gastos. Pero cuando empezó a caminar y medio hablar el niño, la relación madre - hijo empezó a entrar en conflicto. En la guardería lo querían mucho, era bien portado y no causaba mayores problemas, cuando estaba con su mama era todo lo contrario, le hacia berrinche, le pegaba, tiraba cosas y no entraba en razón por mas que le hablara, y eso también empezó a alejarle amistades.

Los días sábados y domingos que se quedaban en casa (no guardería, no trabajo) eran pelea tras pelea, claro que tenían sus días buenos como todos, pero creo que eran contados. Lo que empezó a generarle más problemas fue que no media sus gastos tratándose del niño, quería compensar el hecho de que no tuviera padre con una fiesta de cumpleaños grande, el mejor disfraz para el desfile, la piñata más grande… llegaba la quincena, empezaba a pagar los prestamos y se quedaba sin suficiente para gastos tan indispensables como pagar la renta.

La situación fue empeorando en todos los aspectos, tanto económicos, de trabajo (la empresa para la que trabajaba se mudo muy lejos de su zona de comfort) y en su desesperación por no poder controlar a su hijo, al grado que prefería dejarlo encargado con una vecina o alguien de confianza para poder descansar un domingo en la tarde.

A final decidió regresar a su casa, con sus papas, mientras mejoraba su economía y la relación con su hijo. Aprendió de no muy buena manera que ser madre soltera no es “compensar” que no le diste un padre a tu hijo, si no que eres el apoyo de tu hijo y debes ser responsable en todos los aspectos.

Ahora esta, si no en una situación mejor, al menos pasa más tiempo con su hijo, están aprendiendo a conocerse y tenerse paciencia. El dinero sigue siendo un inconveniente pero no en tono desesperante, al parecer los problemas surgen ahora de la familia. No sé si hizo bien o mal en mudarse, sin embargo, ya pronosticó que regresara a la ciudad cuando su hijo sea grande.

Madre soltera. Una situación diferente es cuando se pierde al papa, sobre todo cuando se esta embarazada o se tiene poco.

Se casaron al poco tiempo de conocerse (¿amor a primera vista?), y al mes ella anuncio su embarazo. Empezaron a hacer planes para tener un negocio propio y así darle al bebe todo lo necesario, sobre todo atención. Estaba cumpliendo tres meses de embarazo cuando le llego una llamada en la madrugada, tenía que ir a reconocer a su marido porque lo habían atropellado.

Lo siguiente fue muy triste pero se tenía que pensar en lo práctico. Lo más fuerte, darte cuenta que serias responsable de tu hijo en todos los sentidos.

Regreso a casa de sus papas. En el transcurso de su embarazo enfrento una operación, varias gripas y un duelo que no se podía dar el lujo de vivirlo porque tenía que ser fuerte para su bebe.

Poco a poco fue acomodando su vida a su nueva situación. Trabajar solo medio tiempo para atender a su hija, hacer rendir su sueldo (mini-sueldo) para la leche, pañales, medicinas, ropa… afortunadamente su familia ha sido de gran apoyo, tanto económica como anímicamente.

De momento estan tranquilas, las dos, tienen lo necesario. Aun falta un tiempo para que vaya a la escuela, entonces habría que pensar con enfrentar todos esos gastos y los  horarios. La relación madre-hija va bien, se entienden, juegan, se acoplan a sus horarios; y la familia tiene una nueva consentida.

Son situaciones muy distintas pero el común es que las circunstancias las hicieron madres solteras, y a pesar de todos sus problemas siguen siendo dignas de admiración.